Viajar entre ciudades españolas y francesas en AVE resulta entre un 50 y un 100% más caro que hacerlo entre otras ciudades europeas. Esto es lo que se desprende de un estudio realizado entre abril y septiembre del 2016 el buscador liligo.com. Estos altos precios explican el hecho de que la demanda de pasajeros y de mercancías ha sido un 70% inferior a la calculada en la planificación de la construcción de la vía de alta velocidad entre España y Francia.
Según el estudio realizado por liligo.com viajar entre Barcelona a Marsella en AVE cuesta de media 88 euros, lo que da un coste por kilómetro de 0,22 euros. Lo mismo ocurre con el trayecto Barcelona-Niza, cuyo precio medio ronda los 102 euros y 0,21 euros de media por kilómetro. Estas tarifas resultan elevadas si las comparamos con otras rutas europeas como Milán-París, la cual presenta un precio medio de 71 euros y un coste medio por kilómetro de 0,11 euros. Lo mismo ocurre con trayectos como el París-Génova, con un precio medio de 41 euros y un coste por kilómetro de 0,10 euros.
Fuera de las rutas entre España y Francia solo figuran dos trayectos con precios elevados, el Berlín-París con un coste medio del kilómetro de 0,21 euros, y el trayecto París-Londres, con un precio medio por kilómetro de 0,45 euros. Este último es el más caro de toda Europa para trenes de alta velocidad producto de los costes de mantenimiento del Eurotúnel. Los elevados precios contribuyen a que los viajeros opten por utilizar aerolíneas de bajo coste como Vueling, Transavia, easyjet o Ryanair para viajar a ciudades francesas.
Por otro lado los precios del AVE entre ciudades españolas mantiene un rango de precios europeo. Por ejemplo, la tarifa media para ir de Madrid a Sevilla es de 51 euros y el precio medio del kilómetro para este trayecto es de 13 céntimos de euro.
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